La opinología como evidencia para formular políticas públicas

Creo que los profesionales de otras carreras pueden ser buenos maestros de escuelas, diría que estoy casi convencido de ello, después de todo, quién tiene mejor conocimientos de matemáticas, ¿un docente de formación o un ingeniero o matemático?

Hasta ahí mi opinión sobre el tema que puede generar un debate en el sector educativo del país, a raíz de la publicación de la Ley 29510 que permite que todos los profesionales puedan ejercer la docencia en el Perú, ley que evidencia una marcha atrás con respecto a todo el proceso de selección, formación y contratación docente que el gobierno estaba realizando al parecer producto de una serie de circunstancias favorables (la presente ley evidencia que todo esto fue improvisado).

Lamentablemente para mis ideas, existen algunos países (los que cuentan con las mejores notas en las escalas de evaluación internacional), que toman decisiones particulares y establecen criterios para la selección de sus docentes, por ejemplo:

Finlandia.-  Para acceder a la licenciatura de magisterio, se deben superar dos procesos de selección luego del cual "los mejor pasan a ser docentes". El primer proceso se lleva a cabo en una unidad de evaluación centralizada (Universidad de Jyväskylä), uno de cuyos criterios es que el expediente del candidato debe superar el 9 de media en sus estudios de bachillerato. Una segunda selección se hace en las Facultades de Educación. Entre otros aspectos se evalúa la competencia lectora y escrita de los aspirantes, la capacidad de empatía y comunicación de los mismos, habilidades artísticas, musicales y de alta competencia matemática. Menos de un 9% de los aspirantes puede acceder a la formación como profesor de Educación Primaria en las Facultades de Educación.

Inglaterra.- El sistema de acreditación de instituciones que imparten programas de formación docente contiene los siguientes estándares para evaluar  las características de los estudiantes:

  • Realización de una prueba de ingreso para estimar el nivel que el estudiante alcanzará al egreso.
  • Calificación mínima de C en pruebas de lengua y matemáticas para el ingreso.
  • Aprobación de exámenes físicos y psíquicos requeridos para ejercer la docencia.
  • Realización de al menos una entrevista personal al momento del ingreso.

Singapur.- La selección de docentes, en la cual 1 de cada 6 postulantes es aceptado, incluye los siguientes aspectos:

    Verificación de calificaciones mínimas:

    • Académicamente, los postulantes deben estar dentro del 30% superior de su promoción.
    • Los postulantes deben haber completado la educación escolar y universitaria pertinente.
    • los postulantes deben demostrar interés en los niños y en la educación.

    Verificación de conocimientos:

    • Los postulantes deben tener un alto nivel de conocimientos.
    • Está demostrado que los conocimientos de los docentes inciden sobre los logros más que cualquier otra variable.

    Verificación de actitud, aptitud y personalidad

    • Llevada a cabo por un panel de tres directores expertos.
    • Puede incluir pruebas y actividades prácticas.

Corea del Sur: Para convertirse en docente primario, el postulante debe completar en primer lugar un curso de grado en educación de cuatro años en una Universidad Nacional de Educación. Las vacantes para estos cursos son limitadas, para garantizar que la oferta de docentes se ajuste a la demanda. El ingreso es por orden de mérito. La admisión a los cursos de primer grado en Corea del Sur se basa en los resultados del Examen Universitario de Ingreso nacional; el puntaje mínimo de ingreso a los cursos de capacitación docente exige que los estudiantes se encuentren dentro del 5% superior de su promoción. Así, los cursos son altamente selectivos y sus graduados tienen muy altas probabilidades de conseguir empleo como docentes. Esto asegura que la atracción, estatus y calidad de los cursos permanezcan altos.

Las políticas públicas son lineamientos que afectan a los que nacemos en esta nación del Sol, si el Estado quiere privatizar las cárceles o pagar vouchers a los padres por la educación de sus hijos, esto afectará a todos de alguna u otra manera.

Sólo me he centrado en las condiciones de ingreso, existen más información en la biblioteca del PREAL o en el informe McKinsey que da cuenta de las experiencias de diferentes países en el proceso de formación y retención de mejores docentes.

La opinología es una manera de ver la realidad, a veces la ideología también se mete por los palos y la blinda “académicamente”, esta se basa en muchos prejuicios y un sentido común que a veces resulta, pero cuando la cotejamos con la realidad puede que nos sorprendamos y lamentablemente en temas educativos los errores se pagan hasta  por 40 años como lo afirman Michael Barber y Mona Mourshed.

Un texto de ayuda para los que quieran cambiar esto: Políticas públicas basadas en evidencia, aunque pensandolo bien cuando el Estado hace y deshace como quiere, apoyaría la popular frase: “las mejores políticas públicas son aquellas que no se hacen”.

3 comentarios en “La opinología como evidencia para formular políticas públicas”

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  2. Julio, finalmente cual es tu opinión? No me queda clara. Te parece que deben ingresar a la docencia sin ser docentes de carerra, o que no deben. Yo creo que hay kuchos profesionales que pueden ser excelentes docentes, sí, pero por encima de eso creo que ese «pueden ser» es muy laxo, queda muy suelto, es muy azaroso, asi que pienso que sí se les debe exigir formación pedagógica a aquellos que quieran entrar a la docencia desde otras disciplinas, precisamente porque «pueden ser» buenos pero no está garantizado que lo sean. Además, me parece una falta de respeto impresionante a la profesión docente, a la que hay que apoyar y no eliminar de esta manera casi casi como si fuera innecesaria. ¿Qué piensas tu? Saludos!! Susana

  3. Pienso igual que tú, los profesionales pueden ser buenos pero necesitan conocimientos en pedagogía y otras áreas. Creo también que a largo plazo si se sigue esta línea en política magisterial (que NO existe) la carrera docente desaparecerá, no por una ley, sino por el paulatino decremento en las matrículas universitarias en esa carrera.

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