Ayer me enteré que el gobierno chileno está invirtiendo en la laptop de Intel llamada classmate, siendo este el primer país en ofrecerla. En el blog Educación y Cultura, Carlos Albaladejo se decepciona del evidente sentido de lucro de Intel a comparación de la filantropía del proyecto de Negroponte (OLPC, la laptop verde de $100 del MIT).
Pues a decir verdad me parece que ambos buscan lo mismo: ser sostenible financieramente, hace bien Intel por ser más sincero en sus propósitos. Pero me preguntaría: ¿estos aparatos nuevos ayudarán a mejorar la educación?, personalmente me he sentido atraído por esta idea, pero el interesante artículo de Eduardo Villanueva al respecto puede hacernos pensar de manera distinta.