El jueves 20 de julio el Ministerio de Educación publicó el decreto supremo N° 012-2023-MINEDU norma que aprueba disposiciones para garantizar el restablecimiento del Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa – SINEACE, es decir la reactivación de los órganos operadores IPEBA, CONEACES y CONEUA en cumplimiento de lo establecido en la Segunda Disposición Complementaria Final de la Ley N° 31520, Ley que Restablece la Autonomía y la Institucionalidad de las Universidades Peruanas
El SINEACE es el organismo encargado de normar los procesos de evaluación, acreditación y certificación de la calidad educativa, abarcando todo el territorio nacional y respondiendo con flexibilidad a las características y especificidades de cada región del país. El SINEACE fue creado el 2006 gracias a la ley 28740, sin embargo, en el 2014, fue declarado en reorganización por la Ley N° 30220, Ley Universitaria, pero fue restituido el año pasado por la Ley N° 31520, que fue validada por el Tribunal Constitucional.
Bajo esta norma se deja un plazo de 60 días para la elección de los nuevos presidentes de los órganos operadores, el acual Consejo Directivo ad hoc del Sineace deberá continuar ejerciendo sus funciones hasta que se conforme el nuevo Directorio; asimismo otorga un plazo de 180 días para para la aprobación de un nuevo reglamento del SINEACE.
Durante estos 9 años, el SINEACE continuó con sus actividades de forma normal, excepto por la acreditación en educación básica, que se detuvo. El resto de los procesos siguieron su ritmo propio. La reorganización que nunca se realizó le restó impulso y quedó eclipsada mediáticamente por el licenciamiento de universidades. A pesar de eso, el SINEACE siguió elaborando nuevos estándares y procedimientos de acreditación para institutos, programas de pregrado y posgrado.
Ojalá que esta situación se pueda revertir, pues para mejorar la calidad se deben priorizar los procesos de acreditación sobre los de licenciamiento. Estos últimos, si bien son importantes, solo establecen una base mínima para la operación. La calidad y la mejora continua se sustentan en procesos de acreditación nacional, una experiencia que otros países han desarrollado.
Ahora con los órganos operadores de regreso, esperaremos novedades en el sistema de aseguramiento de la calidad, nuevos actores y nuevas exigencias.
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Decreto Supremo que aprueba disposiciones para garantizar el restablecimiento del SINEACE